SIN CENSURA, SIN EXCUSA. Lic. José Gerardo Mosqueda Martínez

   SIN CENSURA, SIN EXCUSA. Lic. José Gerardo Mosqueda Martínez

0
Compartir

MosquedaSer un observador a distancia de los acontecimientos de mi país, estar interesado y durante algún tiempo ser parte de la dinámica de los propios acontecimientos no es causa suficiente para escribir esta columna,  lo que esta sucediendo en nuestro país es un tema que se encuentra en los medios de comunicación de todo el mundo.

Es decir, interesarse en lo que está pasando con la libertad de expresión no es un acto de solidaridad, es una necesidad apremiante de definiciones para pensar en la estabilidad del estado mexicano.

No podemos acostumbrarnos a narrar los acontecimientos sin la convicción de que se debe terminar con el entorno de impunidad con el que se mueven los delincuentes en nuestro país, generalmente derivado de la relación de complicidad entre algunas autoridades y los propios delincuentes, a esos que generosamente se les llama delincuencia organizada.

Que bueno que el presidente Peña tuvo la iniciativa de convocar a la reunión para hablar de las medidas que el gobierno mexicano tomará ante el desastroso deterioro del estado mexicano. De esas dimensiones es el hecho de que estén muriendo periodistas en nuestro país a manos de bandas de delincuentes, tan grave como que autoridades gubernamentales tengan tiempo censurando a los periodistas ya sea  con la  sutileza del dinero público, ya sea con la rudeza de la coacción y en algunos casos con el cinismo del empleado gubernamental que pervierte la relación con el comunicador a cambio de tratos preferenciales, contratos leoninos, planes de compra de publicidad y manejo de los lineamientos editoriales… por perversos que puedan ser todos estos mecanismos de relación con los medios de comunicación, nada justifica que esté de por medio la vida de un periodista.

No es de mayor dignidad humana la vida de un comunicador con relación a la de cualquier ciudadano, la vida humana es de igual dignidad independientemente del oficio. Ese no es el tema.

El tema es la impunidad con la que se involucran a los comunicadores en su relación con la delincuencia y con las autoridades en turno, es la nula visión de las autoridades para hacer respetar la libertad de expresión como un derecho consagrado constitucionalmente y que le da sentido al estado mexicano que obtiene sus fundamentos en el respeto a los derechos fundamentales del ser humano y a los que reconoce el marco constitucional.

Nunca como ahora es materia de solidaridad con los comunicadores de nuestro país al ver que sus vidas corren peligro por lo que dicen, por lo que escriben, nunca como ahora padecemos de los vacíos de autoridad, de un estado mexicano atado de manos por sus propias acciones contaminadas de corrupción .

Las vidas perdidas de decenas de periodistas deben de producir en los mexicanos y especialmente en la relación de autoridades y comunicadores nuevas formulas de relación fincadas en el respeto a la libertad de expresión, pero antes en el respeto a la vida misma de las personas que hacen posible los contenidos de los propios medios.

La profunda crisis que vive el país puede tener miles de explicaciones, la mayoría de estas se verán por los efectos, pero las visiones de solución tienen pocos causes y todos ellos pasan por una relación de respeto a las instituciones que hacen posible la armonía en el estado mexicano, si las autoridades no llegaron mas lejos que lo que la corrupción les permitió, la sociedad mexicana si puede, tanto como sea posible, asumir con madurez la vida de los ciudadanos que hacen posible los contenidos en los medios e comunicación, en las redes sociales, en la conversación del día a día. Así es como se construye un gran país.

Hasta la próxima en PROSPECTIVA.

José Gerardo Mosqueda Martínez,

Presidente del Instituto de Administración Pública de Guanajuato 

presidente@iapguanajuato.org, gmg@gerardomosqueda.com.mx

gerardomosqueda/ mosquedagerardo