Con el programa Educación sin Fronteras, INAEBA atiende a paisanos en Estados Unidos o aquellos que han sido repatriados a Guanajuato.
- Alberto y Elvia han acreditado primaria y secundaria, respectivamente, con el objetivo de encontrar oportunidades laborales en su tierra natal.
León, Guanajuato, a 09 de febrero de 2020.-Al volver a preguntarles a Alberto Gómez y su esposa Elvia García si volverían a Estados Unidos para intentar conquistar el “sueño americano”, su respuesta inmediata es no, y es que el no contar con un certificado de estudio los limitó en conseguir un buen empleo que los ayudara a salir adelante como familia.
Fue hace 14 años que Alberto y Elvia llegaron a Los Ángeles, donde se instalaron para formar una familia; el no contar con estudios, obligó a que Alberto consiguiera un empleo de cocinero, donde las cargas de trabajo fueron pesadas y el pago no era suficiente.
“Estuvimos 14 años viviendo en Los Ángeles, nuestra vida al inicio fue muy difícil como cualquier persona que llega de migrante a otro país, nos establecimos, yo aprendí cocina, estuve trabajando por 10 años en un restaurante, pero lamentablemente con la política migratoria de ahora tuve que dejar el país”, dijo.
Hace seis meses Alberto fue deportado y su esposa, junto a dos de sus cinco hijos decidieron seguirlo hasta su tierra natal; ya instalados en Guanajuato, tienen la esperanza de salir adelante, aunque el no contar con un certificado de estudios se convirtió en un obstáculo.
Ahí fue que el Instituto de Alfabetización y Educación Básica para Adultos (INAEBA) llegó a las vidas de la familia Gómez García, ayudando en primera instancia a validar los estudios de Emiliano, hijo de 15 años de edad que buscaba retomar la preparatoria, pero que no contaba con certificado alguno de su educación básica.
A Emiliano le siguieron sus padres y con la atención educativa que les brindó INAEBA, Alberto concluyó primaria y Elvia secundaria, ambos con 51 años de edad. El padre de familia actualmente es chofer, sin embargo su meta es conseguir un mejor empleo que mejore la calidad de vida de sus hijos y esposa, para ello está decidido en continuar con secundaria y preparatoria.
“Me piden documentos para cualquier trabajo, nivel de estudios y eso me motivó a hacerlo, para tener más oportunidades para un trabajo; yo quiero seguir, hoy quiero hacer un examen para la secundaria, quiero ir subiendo de nivel para tener una oportunidad más delante, si tengo la oportunidad de hacerlo lo voy a hacer”.
Hoy la familia tiene claro que no buscará nuevamente el sueño americano, pues están seguros que en Guanajuato con esfuerzo, dedicación y estudios lograrán lo que se proponen. Alberto quiere infundir en sus hijos que la educación es pilar para poder alcanzar sus metas.
“Uno como padre no quiere que sus hijos pasen lo que uno pasó, les da una mejor calidad de vida con el estudio y creo que pueden llegar lejos con el estudio; aquí se puede lograr con un buen estudio, aquí se puede hacer, vale la pena intentarlo en tu país”.
A través del programa Educación sin Fronteras, INAEBA atiende a los paisanos guanajuatenses que se encuentran en Estados Unidos y por la falta de un certificado de educación básica les han cerrado las puertas ante oportunidades laborales; además atiende a aquellos que han sido repatriados al Estado y buscan una nueva oportunidad para superarse.
Durante 2019 se atendieron a 666 migrantes guanajuatenses, de los cuales 493 lograron acreditar sus estudios, 146 en primaria y 447 en secundaria.
Para los meses de diciembre y enero se reforzó la atención en la entidad ante el retorno de miles de migrantes por las fiestas decembrinas, lo que permitió atender a 321 personas, de las cuales 300 han acreditado su educación básica, 84 en primaria y 216 en secundaria.