Al parecer ya quedó claro quienes estarán en la boleta electoral de julio de 2018 con el anuncio de que los tres independientes (liberados de sus propios partidos de origen) sí lograron las condiciones de cantidad y dispersión de las firmas para conseguir ser candidatos.
Los tres que encabezan las alianzas y los tres que a pesar de su partidos de origen estarán en la boleta se repartirán las intenciones de votación de los mexicanos, así que, diciéndolo con propiedad, llegaron a las boletas los conflictos internos de los partidos tradicionales, los que por décadas han mentido a los ciudadanos… y veremos que los conflictos internos también serán ingredientes para decir por quien no vamos a votar.
Por ahora sigue habiendo un importante 25% aproximadamente, que sigue sin interés por ir votar el día de las elecciones, también cuenta que hay un muy alto porcentaje de personas que no saben que existen los independientes, aunque el porcentaje más sólido es el que representa a los que no votarían por algún candidato independientemente de sus propuestas (cuando las haya).
Es muy alto el porcentaje de mexicanos que no votaría por el PRI, no importa como se llame su candidato. La larga historia de corrupción e impunidad con los gobiernos del PRI… hoy hace que este extraño candidato, al que siguen sin comprobarle que esté vinculado con actos de corrupción, está decidido (no por él) siga sin desmarcarse de la historia de corrupción de quien lo impuso candidato. Discursos de Érica no le van a alcanzar para cambiar la opinión de los mexicanos que no votarán por el PRI por ser r el PRI.
El candidato de MORENA que nació a la política en medio de historias de corrupción, que ya ofreció perdonar a los corruptos, que los recluta para su equipo de campaña, que los exonera de sus negros historiales de corrupción pero que no se cansa de decir que va a combatir la corrupción, por ahora está capitalizando los porcentajes negativos del PRI. Hay mexicanos que creen que es una esperanza para México, que le vamos a hacer.
La historia de corrupción del sistema político mexicano lo tiene como puntero en las encuestas… también estaba así en las dos elecciones anteriores.
El auto impuesto candidato del PAN decidió apostar a una estrategia que es una suma algebraica, es decir, que para ciertos aspectos suma y para otra resta… por lo pronto, no se ha librado de la historia de corrupción que le descubrieron, por más que le “acerquen el pizarrón” y trate de explicarlo.
En el PAN, que por fin decidieron reconocer que la congruencia con los valores en la política y sus principios del pensamiento social Cristiano, han sido buenas ideas para los discursos… en una alianza con el disminuido PRD que tendrá más posiciones que en elecciones anteriores y menos estructura de partido político, apostaron a declarar la guerra anticorrupción contra el presidente actual. En términos de opinión pública no han logrado posicionar ese mensaje.
Falta ver con qué estrategias entren en el escenario los candidatos llamados independientes, pero no tardaremos en saber, sólo restan dos semanas de la intercampaña.
Por lo pronto hay más ideas de por quién no votar para que le vaya bien a México, es decir, seguimos sin propuestas por parte de los, candidatos.
Hasta la próxima PROSPECTIVA.
José Gerardo Mosqueda Martínez,
Presidente del Instituto de Administración Pública de Guanajuato
presidente@iapguanajuato.org, gmg@gerardomosqueda.com.mx
gerardomosqueda/ mosquedagerardo